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Las posibilidades de que Luis Díaz llegue al FC Barcelona se han enfriado notablemente, mientras el club avanza firmemente en las negociaciones por el fichaje de Nico Williams, extremo del Athletic Club. Aunque en un principio el colombiano era la opción preferida del director deportivo Deco para reforzar el ataque por izquierda, tanto el presidente Joan Laporta como el técnico Hansi Flick consideran más atractiva la llegada del joven navarro.
Los argumentos detrás de este giro de preferencias son claros: Williams tiene apenas 22 años frente a los 28 de Díaz, lo que representa una inversión más a largo plazo. Además, ya está adaptado al fútbol español y al entorno de LaLiga, lo cual facilitaría su integración al vestuario culé.
El factor económico también pesa en la decisión. Liverpool pide alrededor de 80 millones de euros por Luis Díaz, una cifra que el Barça no está dispuesto a pagar, especialmente considerando su edad. En contraste, la cláusula de rescisión de Williams es de 58 millones, una cantidad más razonable para la limitada economía azulgrana.
Otro punto a favor del jugador del Athletic es su disposición a negociar directamente con el Barcelona. A diferencia de Díaz, que no ha ejercido presión para salir del Liverpool, Williams ha mostrado interés en sumarse al proyecto catalán.
Actualmente, Deco ya se encuentra en Ibiza, donde el extremo disfruta de sus vacaciones, para intentar cerrar el acuerdo. Eso sí, el fichaje está condicionado a la salida de al menos una figura del plantel, y el club espera lograrlo con una posible transferencia de Ter Stegen o Ronald Araújo, lo que permitiría inscribir al nuevo refuerzo sin infringir los límites salariales de LaLiga.